En medio de un precioso parque de 32 hectáreas limítrofe con el Bosque de Soignes se halla el restaurante Le Pesage. Se trata de un edificio cargado de historia, construido en 1900 por el arquitecto Francois Keats y ampliado en 1951 por el arquitecto Paul Breydel, que se encargó de añadir el anexo modernista. Su uso inicial fue servir de báscula para pesar a los jinetes con la silla de montar antes de las carreras que se celebraban en el hipódromo de Boistfort, pero desde que finalizó la actividad hípica en 1995 hasta su restauración en 2017 estuvo prácticamente abandonado.
La rehabilitación y la transformación de este singular edificio en restaurante ha podido llevarse a cabo gracias por una parte a Michel Culot CEO del proyecto Drohme, y por otra a Lionel Jadot, el arquitecto de interiores a quien se confió la tarea de crear un espacio respetuoso con el medio ambiente utilizando materiales reciclados pero sin olvidar la singularidad del lugar, y además donde estuviese muy presente la idea de compartir agradables momentos alrededor de una mesa. Lionel Jadot pudo dar rienda suelta a su imaginación en este espacio y el resultado es la creación de un restaurante con una decoración divertida, cálida, informal, ecléctica y llena energía.
Cabe destacar el llamativo suelo hecho con desechos de mármol, las cortinas pintadas por Lionel, así como la divertida decoración de los baños de la que se ha ocupado su hija. Todo queda en familia.
La apertura de este restaurante ha supuesto un importante paso para el futuro del parque Drohme porque ofrece la posibilidad de pasar el día y combinar la práctica de deportes (como el golf, bicicleta, montar a caballo, marcha nórdica,…) con una deliciosa comida o cena.
El restaurante está gestionado por Sandrine Jadot, hermana de Lionel y su hijo Charlie Delval, ambos con amplia experiencia en el mundo de la hostelería. La carta está pensada para que los comensales pidan varios platos cada uno y los compartan como si se tratasen de raciones, pues fue precisamente en España donde Sandrine descubrió este concepto y le gustó tanto que decidió adoptarlo para el restaurante.
En Le Pesage proponen una cocina creativa, local y de temporada, (a excepción del pulpo de Galicia) caracterizada por una cocción lenta de los alimentos a los que se les da un toque final “a la plancha”. La nota española en los platos la ponen Javier y Germán, dos chefs de Granada.
Entre los platos que pude degustar destacaría las sardinas marinadas en aceite de oliva, la dorada servida entera, un entrecot súper jugoso servido ya troceado y el pulpo de Galicia con pimentón de la Vera, cocido en su punto y con un delicioso toque final a la plancha. Los acompañamientos así como las diferentes salsas se sirven aparte. Una mención especial merecen los postres, que me parecieron exquisitos, tanto el mus de chocolate con aceite de oliva, flor de sal y crujiente de cereales como la piña asada con miel y pimienta de Sichuan. La intención de Charlie y de Sandrine es ir ampliando los horarios de manera progresiva en los próximos meses y convertir Le Pesage en un lugar donde se pueda ir a desayunar, a tomar un café, a merendar o a celebrar una reunión de negocios. El restaurante cuenta además con un amplio parking.
Es TOP por su ambiente informal, acogedor y alegre
Es ideal para ir a comer a mediodía
No te pierdas el pulpo y el mus de chocolate
Le Pesage
Chaussée de la Hulpe 51, 1180 Uccle
Tfno: 02 242 81 38
www.lepesage.be